Hay una expresión del latín que es mi eslogan personal, natura artis magistra, la natura es la maestra de las artes, estoy convencida que la Naturaleza es la que más nos puede enseñar sobre muchos aspectos de la vida. Hice una intervención, Adeu Tristesa, te daré un catalogo; en unos campos de naranjos los arboles se habían muertos de la enfermedad, la tristeza.
Monique Bastiaans,
http://www.moniquebastiaans.com/
BARBARA: QUÉ TE HA EMPUJADO A VENIR AQUÍ A ESPAÑA?
Creo que tengo algo dentro, de mis antepasados, un hermano mío vive en Zaragoza y pensamos que hay algo que nos une con la cultura de España. He venido cuando era niña, luego volví cuando era artista buscando un sitio para trabajar en la naturaleza. Una vez aquí he llorado porque sentí que pertenezco aquí, son mucha más las cosas que me identifican con este país que simplemente el buen clima. Yo misma no sé muy bien porque pero el hecho es que me acoplo mucho más a las costumbres y la cultura de aquí que a las de Holanda o de Bélgica. Uno se siente a gusto en un sitio no necesariamente porque haya nacido allí, te puedes sentir a gusto en “tu” sitio. No he venido aquí por un amor o por otras razones…simplemente porque siento que es mi lugar. Después de 25 años sigo pensando que, en temas de naturaleza y paisajes, España es una caja de tesoros que no deja de sorprenderte nunca. Aquí, detrás de donde vivo solo hay monte, solo hay naturaleza, delante está la civilización y la ciudad. Este lugar en concreto permite dejarme influenciar tanto por la cultura como por la Natura. Para mi es el lugar ideal para crear.
BARBARA:HABLAME DE TU RECORRIDO ARTISTICO, ¿DONDE NACIERON ESTOS TRABAJOS?
Hay un episodio con trabajos muy diferentes a lo que hago ahora. Cuando estudié Bellas Artes en Holanda aprendí hacer esculturas de manera impresionista. Mira detrás…allí ves un autorretrato en bronce, pues en aquel tiempo, en mis primeros años como artista, trabajaba de esta manera, con bronce y aluminio. Mis obras eran más bien impresionistas. Luego, una vez aquí en España, las piezas empezaron a hacerse más grandes, empecé a hacer instalaciones e intervenciones en la naturaleza. Lo curioso fue que un día, mientras estaba realizando unas de las obras para la exposición Plaisir de Fleurir, de repente me vino una imagen a la cabeza: yo, siendo una niña de 10 años que se había encontrado en el garaje dos escobas y unos rollos de cuerda. Empecé a hacer “punto” con las escobas, enorme, a lo bestia, así que todo esto de amplificar las cosas, lo tenía dentro de mí desde bien pequeña. Que luego en Bellas Artes me enseñaron a hacer esculturas de manera más bien clásica, con modelos, arcilla y moldes, me alegra mucho porque me ha servido para tener una base sólida. Claro que no tiene nada que ver con la obra que hago hoy en día pero teniendo esta base, sé cuando una pieza está en equilibrio o por ejemplo si las proporciones están bien, o si todas las caras de la obra son interesantes. Todo esto lo he aprendido en lo clásico con lo cual es una base muy buena y desde allí te desarrollas en la dirección que quieras.
Si, si, con las escobas hice una pieza al final, Carpe diem, una pieza de unos dos metros de altura hecha de punto con cuerda gorda y endurecida después.
Luego hay otra cosa: en Holanda mis esculturas impresionistas se vendían muy bien, de tal manera que yo misma sentí que no era posible que a todo el mundo le gustara mi obra. Me pareció demasiado fácil y que eso no era bueno porque todavía no tenía mi camino artístico encontrado. Empecé a abstraer las formas y buscar caminos nuevos. Me agobiaba el proceso de fundir en bronce, mis ideas se desarrollaban muchísimo más de prisa y no aguantaba ese proceso tan lento. Para poder evolucionar a mi ritmo estuve unos años pintando y era como para deshacerme de un estado antes de llegar al siguiente, como las crisálidas. Pasar de hacer bronces impresionistas un día, a hacer instalaciones en la naturaleza con un lenguaje totalmente diferente el día siguiente, me hubiera sido imposible. El cambiar de país también ha contribuido mucho a soltar mi antigua manera de trabajar. Así que mi evolución ha sido muy gradual. Algo muy curioso fue que los últimos dos años en Holanda estuve solo pintando y haciendo esculturas de pájaros volando, sin saber todavía que iba a emigrar. Una vez aquí en España y viviendo en la naturaleza, he tenido una época de producir esculturas con materiales encontrados. Trabajaba mucho con madera, pero al darme cuenta que calificaban esa obra de ‘tribal y primitiva’ otra vez me disgusté porque no pretendía hacer eso, ni soy de ninguna tribu. Fue otro escalón necesario para llegar al lenguaje que sigo utilizando hoy en día. Más adelante empezaron las primeras instalaciones, las primeras obras en la naturaleza y poco a poco esto se ha ido consolidando. Creo que llevo muchos años en la misma línea con unos temas que se repiten pero quizás ahora los abarco de otra manera.
BARBARA:LA NATURALEZA VUELVE SIEMPRE. ¿QUE IMPORTANCIA TIENE EN TU VIDA ARTISTICA?
Hay una expresión del latín que es mi eslogan personal, natura artis magistra, la natura es la maestra de las artes, estoy convencida que la Naturaleza es la que más nos puede enseñar sobre muchos aspectos de la vida. Hice una intervención, Adeu Tristesa, te daré un catalogo; en unos campos de naranjos los arboles se habían muertos de la enfermedad, la tristeza. Habían un montón de arboles, quité todas las ramas pequeñas hasta reducirlos a un tronco con sus ramas principales y cuando empecé a tensar y grapar las telas alrededor de las ramas es cuando realmente se revelaba la forma básica de cada naranjo. Me emocionó descubrir que cada árbol tenía su forma única, según la dirección y posición de sus ramas. ¡270 sorpresas! Además me di cuenta que utilizando toda mi creatividad no hubiera sido capaz de diseñar tanta diversidad de formas, ni hubiera llegado a unas formas tan extravagantes. La naturaleza tiene una infinidad de ejemplos, de combinaciones, de soluciones, más que cualquier artista nunca podía llegar a encontrar, por eso es mi inagotable fuente de inspiración. El vivir en la naturaleza me proporciona un estudio al aire libre sin límites, tengo espacio para hacer pruebas, para ver como las piezas reaccionan a los elementos, etcétera. Supongo que no haría ‘landart’ si viviera en un piso en alguna ciudad grande.
BARBARA:¿QUE REPRESENTAN ESTAS FIGURAS TAN GIGANTES, TIENEN UN SIGNIFOCADO CONCEPTUAL O SON MÁS DE LA FANTASIA?
Soy una persona a la que le gusta jugar creando mis obras, inventando los materiales y combinando lo que parece imposible, procuro estar siempre abierta a todas las casualidades que ocurren. Por otro lado me interesa mucho la filosofía, la mística y lo espiritual, el entender cómo funcionan las cosas. Estoy tan llena de lo que descubro que quiero transmitirlo en mi obra. Mi tono es optimista, reconciliador, combinando lo lúdico y lo reflexivo. Observo mucho los detalles en la naturaleza y para poder transmitir la grandeza de lo pequeño recurro a unos formatos desmesurados con la intención de más o menos obligar al espectador a percibir lo que normalmente va pisando o ignora. Formas orgánicas que recuerdan a flores vuelven continuamente en mi obra. Las flores son elementos divinos, su belleza y su aroma son eternas, sólo es efímera su manifestación en una forma material. Mi obra Todos los caminos llevan aroma que toma como referencia la floración del musgo, genera una llamada de atención sobre lo insignificante, lo que nos pasa inadvertido y a la vez quiere recordar la necesidad de alegrar el día a día a partir de los estímulos de lo sencillo. Lo que importa es disfrutar del camino. No importa si llegas a Roma.
BARBARA:EL AMBIENTE EN QUE EXPONES ES DETERMINANTE, LA OBRA PARTENECE A EL AMBIENTE. ¿COMO FUNCIONA EN TU MANERA DE TRABAJAR?
Siempre antes de crear una obra para un espacio determinado, me dejo guiar por el ambiente/ el alma/ el genio del lugar, y una vez sintonizada con él, emergen las ideas.
El ambiente y las obras se influyen mutuamente, eso es de la mayor importancia para mí. Sin embargo en mi última exposición, LAS IDEALES, se rompieron todas mis teorías sobre este tema porque la exposición fue ideada para otra espacio, Las Cigarreras en Alicante. Cuando terminó la exposición, me propusieron traerla a la Gallera, aquí en Valencia. Mi primera reacción fue “No, imposible…” y luego pensé “¿por qué imposible?”. Lo probamos y al final ha quedado mejor que en Alicante, con lo cual fue la excepción que confirma la regla. Normalmente suelo ‘escuchar’ lo que un lugar me cuenta, los espacios pueden ser interiores o bien algún lugar en la naturaleza. A veces es la historia de aquel lugar que me proporciona ideas, muchas veces el aspecto de la sala o la geografía del paisaje. Antes de empezar a pensar lo que voy a hacer, siempre quiero ver el espacio, quiero estar allí sola y entonces me habla, me cuenta, me da sugerencias, es como un dialogo, el espacio me cuenta y yo respondo.
BARBARA:LA OBRA DE ARTE VIVE EN VIRTUD DEL ESPACIO QUE SE CONVIERTE EN UNA COSA IMPORTANTE CUANTO LA OBRA MISMA.
¡Claro! Muchas veces una instalación consiste en varias piezas y con eso el espacio que se genera entra ellas llega a formar parte de la obra. Otra cosa muy importante es que los materiales presentes en el lugar donde ubicas la obra dialoguen con los materiales de la obra que introduces, con lo cual es fundamental elegir el entorno ideal para la obra (o crear la obra ideal para el entorno). En las intervenciones en la naturaleza nunca puedes decir dónde termina la obra porque todo el paisaje alrededor está involucrado. Las obras que hago en la naturaleza llegan a formar parte de ella, se encuentran en su hábitat natural con lo cual el lugar potencia la obra y viceversa, es una mutua relación. Como homenaje al propio lugar, introduzco elementos lúdicos en paisajes cotidianos, creando una relación tan intensa que los mimetiza.
BARBARA:TRABAJO Y AMBIENTE FORMAN LA OBRA…
Al tratarse de un espacio creado, intervenido, los puntos de vista se multiplican ya que uno mismo acaba formando parte de la propia obra, pasea literalmente por ella, no la observa pasivamente, la vive, la percibe, la siente. Por ejemplo en la exposición Plaisir de Fleurir en la Sala Parpalló, utilicé todos los sentidos: el olfato, el sonido, la vista y el tacto (cada obra tenía su diferente textura). Eso llega a involucrar y envolver más al espectador. El propio espacio expositivo se desarrolla como objeto en sí mismo, y más teniendo en cuenta que se trata de una obra creada por y para ese mismo espacio, lo escultórico y lo expositivo, el objeto y el espacio, se funden irremediablemente. Y aunque el espacio a primera vista pueda parecer simplemente ocupado por la individualidad de cada uno de los objetos, estos pierden sentido fuera del conjunto y del ambiente creado.
BARBARA:¿COMO SE ORGANIZA UNA EXPOSICIÓN AL AIRE LIBRE?
Normalmente lo organiza alguna entidad y la publicidad la hace esta misma entidad, luego, al ser una obra en un espacio público, se corre la voz con más rapidez con lo cual la obra misma se hace propaganda.
Por ejemplo mi obra Medusea estaba ubicada en la playa de la Malvarosa en Valencia. Había muchísima gente paseando por allí y se encontraban la obra por sorpresa. Uno de los efectos que me más me satisfacen es que el paseante, que no se lo espera, reacciona con un:“ …..pero , ¿qué es esto?” Acuérdate de cuando éramos niños, el asombro que sentíamos al ver una cosa por primera vez, pues eso es lo que me gusta provocar.
Barbara Bacconi,
Marzo 2013
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